Cada vez más mujeres en Ecuador están optando por el láser ginecológico como una alternativa segura, no invasiva y efectiva para mejorar su salud íntima. Pero más allá de la tecnología, lo que marca la diferencia son los testimonios de quienes ya han vivido la experiencia.

Testimonios reales de pacientes

“Después de dos partos, sentía una gran diferencia en mi zona íntima. Con el tratamiento láser recuperé la firmeza y mi autoestima. Lo recomiendo totalmente.”
— Mariana G., 39 años

“Me animé por el rejuvenecimiento vaginal con láser y fue lo mejor que hice. Sin dolor, sin cirugía y con resultados visibles desde la primera sesión.”
— Paola L., 45 años

“Sufría de sequedad vaginal desde la menopausia. Tras tres sesiones, los síntomas mejoraron muchísimo. Me sentí escuchada y acompañada.”
— Ana R., 52 años

¿Qué es el láser ginecológico?

El Dr. Denis Sánchez, ginecólogo en Quito especializado en tratamientos con láser, explica:

“Este tratamiento estimula la producción de colágeno en la mucosa vaginal, lo que mejora la firmeza, la lubricación y la sensibilidad. No requiere cirugía ni anestesia.”

El láser ginecológico se utiliza para:

  • Rejuvenecimiento vaginal postparto

  • Tensado vaginal

  • Sequedad vaginal por menopausia

  • Incontinencia urinaria leve

  • Recuperación después de una histerectomía

¿Cómo es el procedimiento?

El tratamiento suele requerir entre dos y tres sesiones, cada una de aproximadamente 20 minutos. Es ambulatorio, indoloro y no altera la rutina diaria.

Conclusión

El láser ginecológico no es solo una tendencia estética. Representa una herramienta médica útil para el bienestar físico y emocional de muchas mujeres.

“Se trata de recuperar funcionalidad, confianza y calidad de vida”, concluye el Dr. Sánchez.